El Consejo Empresarial de América Latina (CEAL) celebra el jueves y viernes su asamblea anual en Madrid. Un encuentro en el que se darán cita algunas de las grandes fortunas que han optado por entrar en el mercado español, como Jaime Gilinski, que se ha hecho con el 5% del Sabadell, o Juan Carlos Escotet, presidente de Banesco, que adquirió Novagalicia.
A la cumbre acudirán la gran mayoría de directivos del Ibex 35 en busca de oportunidades en una región que, pese a la desaceleración del crecimiento y a las incertidumbres que han despertado algunos países como Brasil, presenta unas posibilidades de crecimiento muy superiores a los de la zona euro.
Pregunta. Este congreso se produce en un momento en el que el capital latinoamericano está entrando con fuerza en España. ¿Es un cambio de tendencia con respecto a lo que pasó con el capital español y las privatizaciones en Latinoamérica en los 90?
Samuel Urrutia. Este momento es muy importante para nosotros. Latinoamérica está madura tras diez años de bonanza propiciados por la revalorización de las materias primas y el buen desempeño de los mercados emergentes. Los países latinoamericanos disponemos de dinero, de estima propia y ya hay compañías comprando en otros países. Sin embargo, Latinoamérica todavía tiene muchos desafíos: su nivel de desigualdad, de pobreza o de conocimiento técnico todavía nos deja muy atrás.
Lo que hay que dejar claro es que los empresarios que están invirtiendo en España no tienen ningún tipo de resentimiento por la conquista empresarial española en los 90. En general están orgullosos por el buen trabajo que han hecho. Queremos que en España se cree valor con la llegada del empresario latino y que los españoles traigan su capital y su conocimiento a un espacio de negocios iberoamericano. El socio ideal de Latinoamérica es España.
Nuria Vilanova. Creemos que en la actualidad podemos entrar en una tercera dimensión. La primera fue las empresas españolas que invirtieron en los 90, la segunda las latinas que han invertido en España y la tercera sería integrarnos como socios y aprovechar las oportunidades en los diferentes mercados. ¿Por qué España se ha vuelto interesante para invertir para los latinoamericanos? Primero por el factor emocional;en segundo lugar porque hay empresas latinas que nos dicen que la empresa española les ayuda a crear marcas globales y a posicionar productos en otros mercados. Y el tercer factor que es que les sirve para entrar en África y Asia.
P. ¿Cuáles son los desafíos que afrontan los países latinoamericanos?
S. U. Si bien la riqueza se ha basado en exportar materias primas, se ha producido un producto final de bajo coste del que no se beneficia el ciudadano. Hay que aumentar la capacidad de innovación para que estos productos terminados generen mucha más riqueza. Por más que 80 millones de personas hayan salido de la pobreza, nos queda la trampa de la clase media, que sigue en muchos casos sin capacidad de conocimiento. Es necesaria mucha educación y hay que trabajar mucho en start-ups y en la promoción del emprendimiento.
N. V. En el Congreso vamos a tratar dos temas muy ligados al emprendimiento. Tenemos el reto de la dimensión a ambos lados y hay que impulsar el cambio para que las pymes pasen a ser medianas, de medianas a grande y de grande a muy grande. Y una de las salidas puede ser el mercado de capital, la salida a bolsa puede ser un factor para pasar de grandes a muy grandes. Y el segundo es el tema del emprendimiento con dos visiones: la importancia de las ideas y los intraemprendedores, aprovechar el conocimiento de la empresa para crecer más rápido.
P. El avance experimentado por el PIB de la región desde 2008 se ha frenado bruscamente en los últimos trimestres. ¿El mensaje que van a transmitir es de optimismo o de cautela?
S. U. El mensaje no es de tranquilidad. Veo que muchos se habían creído que la bonanza era eterna. Pero el promedio de crecimiento del PIB de Latinoamérica, que estaba por encima de la media en la crisis de 2008, ahora está a la mitad. Estamos creciendo menos de lo que está creciendo China, India o Indonesia. Tenemos que ser realistas y ponernos las pilas para seguir creciendo y aprovechar el know-how español.