América Latina «es parte de la solución» a la crisis global y, para consolidarse como tal, debe buscar una integración plena e impulsar la innovación, dijo el presidente del Consejo Empresarial de América Latina (Ceal), el brasileño Ingo Plöger.
Ese es el mensaje central que el Ceal espera transmitir a los gobernantes que estarán el viernes y sábado próximos en Panamá en la VII Cumbre de las Américas que, con la participación de Cuba, reunirá por primera vez desde que se instauró la cita, en 1994, a los 35 Gobiernos del continente.
Plöger integra la misión de 50 empresarios afiliados al Ceal que participará el jueves y viernes próximo en un foro empresarial organizado por el Banco Interamericano de Desarrollo (BID), una de las actividades previas a la Cumbre continental.
Los empresarios entregarán a los gobernantes un documento con recomendaciones para fortalecer al sector privado y con ello, aseguran, impulsar el desarrollo de una región latinoamericana donde viven alrededor de 600 millones de personas, muchas en la pobreza.
«Estamos en un diálogo con la parte política para decirle que América Latina es una solución, no hace parte del problema mundial», enfatizó el presidente del Ceal, que agrupa a unos 600 empresarios de la región.
Argumentó que Latinoamérica es «una zona de paz», en la que no existe «ningún conflicto abierto», que se caracteriza por países con una gran identificación cultural y que puede garantizar al mundo «soluciones alimenticias y de recursos energéticos».
Partiendo de esa premisa, de la que deben convencerse los propios latinoamericanos, la región debe encaminarse entonces hacia la integración plena y aprovechar la «natural inventiva» de los que habitan esta parte del mundo para impulsar la innovación en todos los campos, especialmente la producción.
«Nosotros estamos haciendo la invitación a los líderes» políticos y civiles de la región «a pensar en las Américas sin fronteras mentales ni físicas», dijo Plöger.
La concreción de esa idea pasa por una integración energética y también «de los espacios democráticos», así como impulsar un modelo educativo regional, explicó.
«Varios países están ofreciendo para las Américas y también para Asia y Europa los recursos naturales, que podemos apuntalar con tecnología, con innovaciones» para darle valor agregado, agregó Plöger.
Latinoamérica, además, «es de los pocos continentes que está abasteciendo de alimentos a su propia población y también está exportándolos», y también es «un mercado muy importante en las cadenas productivas globales» dado el crecimiento de la clase media en el continente, destacó.
Plöger aseveró que la crisis en el mundo desarrollado, que ha mermado el crecimiento de Latinoamérica tras una década de pujanza, representa una «oportunidad» para que la región se reinvente y sus líderes tracen un camino hacia una prosperidad a largo plazo.
La Comisión Económica para América Latina y el Caribe (CEPAL) informó este martes de que calcula que el producto interno bruto (PIB) de la región crecerá un 1 % en 2015, por debajo del 1,1 % del año pasado.
«Tenemos que esforzarnos mucho para lograr» consolidar la región como una plataforma para la solución a los problemas mundiales en asuntos como alimentación y energía, y todo «comienza con el primer paso de construir una visión de una América sin fronteras», insistió.
En ese sentido, el presidente de la Ceal expresó que ese organismo ve «muy positivamente el diálogo» iniciado por Cuba y Estados Unidos en diciembre pasado a fin de regularizar sus relaciones a todo nivel, tras más de medio siglo de tensiones.
«No queremos aislar a nadie, queremos incluir» a todos los países «si es posible en un mismo ambiente de libertad», añadió Plöger.
La llamada II Cumbre Empresarial de las Américas, es uno de los cuatro foros previos a la VII Cumbre de las Américas, y el BID ha anunciado que asistirán una docena de mandatarios, entre ellos el de Estados Unidos, Barack Obama.