América Latina vivió una década dorada que «conmovió a toda la región» y comenzó a recibir «señales críticas a partir de 2007, con motivo de la crisis económica mundial», provocando que «los factores de impulsión que la generaron ya no estén, o estén en contra», según ha explicado el ex primer secretario general iberoamericano, Enrique V. Iglesias.